Es de conocimiento general que el café es una bebida obtenida a partir de semillas tostadas y molidas de los frutos de la planta de café y que es de gran utilidad para conseguir levantarnos por la mañana gracias a su estimulante contenido en cafeína.
Pero…y si ahora os digo que el café, aparte de ser una bebida, puede considerarse como “comida”.
Pues bien, existen numerosas aplicaciones del café en la gastronomía como ingrediente y potenciador de los sabores y olores de los platos. La mayoría preparado con café tostado pero también hay quien utiliza el café en grano verde.
Sin embargo resulta más inesperado encontrarlo como condimento para una gran variedad de recetas. Lo podemos encontrar de diferentes formatos y variedades. Por ejemplo, puede ser una pareja excelente para el aceite para ensaladas y para cocinar y se puede combinar con caldos y guisos con el fin de matizar y condimentar el plato.
También es posible utilizar el café para darle un toque de sabor y olor al solomillo, las costillas, el pollo, los raviolis, el arroz…¡Incluso a los huevos fritos y las croquetas!
En definitiva, hay todo un mundo culinario repleto de posibilidades por descubrir…
En los últimos años el café es utilizado por los grandes chefs de mundo en la creación de sus nuevas recetas gourmets y variopintos platos vanguardistas, siempre echándole una pizca de imaginación.
¡A ver con qué nos sorprenden ahora!